Los rellenos de arrugas sirven para corregir y eliminar líneas de expresión y arrugas que surgen con el paso de los años. Tenemos diferentes tipos de rellenos faciales.

El más popular es el relleno facial mediante ácido hialurónico. El ácido hialurónico es un producto natural y no permanente que raramente tiene efectos secundarios. Dadas sus propiedades el ácido hialurónico se absorbe rápidamente por el organismo, por lo que es una buena técnica si quieres realizarte u tratamiento de belleza, con resultados inmejorables y eficaces.

Otra categoría son los rellenos de arrugas sintéticos, fabricados por laboratorios de cosmética. Son efectos que se prolongan más en el tiempo y están indicados para combatir las arrugas profundas y la nariz.

Por otro lado, se encuentran los rellenos de arrugas con colágeno. En la actualidad existen diversos colágenos sintéticos, todos ellos son seguros y producen resultados naturales. El relleno facial de colágeno está indicado para las líneas de expresión, las patas de gallo, el código de barras, los surcos nasogenianos (los pliegues de la nariz hacia la boca) y el ceño.

Y, por último, otro de los tratamientos son los rellenos faciales con grasa autóloga. Consiste en rellenar las arrugas a base de la grasa tomada del propio paciente, normalmente se adquiere de los muslos, nalgas o estómago. La idoneidad o no de un relleno con grasa autóloga siempre debe ser evaluado por el médico estético. Sus resultados pueden llegar a ser permanentes, por lo que también es una alternativa interesante.

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